#81 Efectos especiales XIV: Médici
Diferentes sistemas, experiencias y filosofías para crear un trading personal
Sin ser un rey, Lorenzo de Médici hizo de Florencia la corte más brillante de Europa en el siglo XV. Gracias a su mecenazgo, poetas, pintores, escultores y arquitectos llevaron las artes a su máximo esplendor. Conocido como el Magnífico por sus contemporáneos, el más inteligente de los cinco hermanos Médici, rica familia de banqueros, fue patrocinador, entre otros, de Botticelli, Miguel Ángel o Da Vinci. Consiguió que investigadores, artistas, científicos y pensadores de distintos ámbitos conectaran. Por el carácter multidisciplinar que los Médici hicieron converger en la ciudad de Florencia, de esa combinación de talento, surgió el Renacimiento. Uno de los mayores períodos de innovación en la historia de la humanidad. Consiguieron cambiar el mundo a base de combinar ingenio creativo. Y de tal filosofía, el escritor, empresario, MBA de Harvard Business School y orador sueco-estadounidense Frans Johansson publicó en 2007 The Medici Effect. Un libro que se convirtió en el origen del término efecto Médici. Este sugiere que, al juntar individuos de distintos campos, con variadas experiencias y perspectivas, nacen nuevas ideas y formas de pensar. Se crean correlaciones entre disciplinas y culturas, resultando algo original; mejor.
Johansson lo llama la Intersección. Un encuentro que da lugar a la explosión de notables innovaciones. La idea detrás es sencilla y aplicable al trading, como arte que también es. Cuando ocurre una amalgama de campos, disciplinas o culturas, aumenta la posibilidad de combinar conceptos para un abierto número de nuevas percepciones. La Intersección es la confluencia de ellas, que es cuando todo se aliena. Como una directriz, por ejemplo, coincide con una zona relevante, una divergencia y el final de una corrección. Blanco y en botella. Los astros en su sitio. Pero no hablemos de cuestiones concretas en cuanto al análisis técnico. El concepto es mucho más profundo. Se trata de encontrar el trading que realmente encaje con la forma de ser del operador. Con cómo ve este el mercado. De la importancia de beber de distintas fuentes para crear algo nuevo, no ya de cara al resto de participantes, sino a uno mismo. Personal e intransferible. Como traders, podemos generar enfoques extraordinarios conectando puntos de aquí y de allá, y encontrar ventaja en ellos. El efecto Médici consiste en eso. Tomar ideas que se comunican bajo un mismo lenguaje que es el precio, el mercado, y dejar que la creatividad suceda. Sin duda, una buena propuesta para resucitar en una profesión como la nuestra. Tan necesitada de una vuelta de tuerca de cara al propio trader. Veamos.