Cuando empiezas en trading, eres de todo menos un buen operador.
Eres muy malo.
Dedicas mucho tiempo a estrategias que no tienen futuro.
Pero, claro, no lo sabías.
Es normal.
Haces cosas ridículas, esfuerzos innecesarios y te ves envuelto en situaciones absurdas.
Saltas de sistema en sistema, de indicador en indicador, de setup en setup, de mercado en mercado, de gurú en gurú…
No atisbas a ver el tamaño de tu estupidez hasta años después.
Entonces, se te enciende una bombilla, y te dan ganas de darte cabezazos contra la pared.
Hoy, harías las cosas de otra forma, ¿verdad?
Hay un factor con el potencial de adelantar y solventar esto.
En realidad hay varios, pero hoy me centraré en uno muy importante:
La autocrítica.
Tu trading solo será rentable si va acompañado de autocrítica.
De buscar el fallo, la mejora y cómo podías haber hecho las cosas con menos problemas; mejor.
Pero buscarlos en ti, en tu ego y tus sesgos, y no en cuestiones externas como «el mercado, que ha cambiado».
Si no practicas la autocrítica, difícilmente podrás levantar tu operativa.
Y que conste que no es cosa exclusiva tuya. Todos cometemos cagadas gordas.
Y es mediante la autocrítica constante que las enderezamos rápido, mejoramos y crecemos.
Mediante la autocrítica ganas experiencia, siempre y cuando esta te lleve a la reacción.
A eliminar lo que no sirve y potenciar lo que sí.
Sé sincero contigo mismo y registra el error en tu operativa qué más daño, monetario y emocional, te esté causando > Luego, traza un plan y objetivos para eliminarlo > Ejecuta de forma asertiva lo planeado > Una vez resuelto, pasa al siguiente peor error > Vuelta a empezar (sin fin).
Seguirás cometiendo errores, por supuesto, pero no tantos ni tan graves.
Ya no querrás darte cabezazos contra la pared; solo seguir mejorando.
Así que empieza a hacer autocrítica reflexionando sobre los errores emocionales que afectan a tu desempeño con los artículos especiales que envío cada sábado, solo disponibles para suscriptores de pago:
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P.D:
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