Primero, una aclaración: El psicotrading no sirve para nada

Está bien como lectura, pero no deja de ser teoría a base de consejos vacíos que no aportan gran cosa. ¿No hay entonces otra forma mejor de trabajar la gestión emocional en el trading? Seguro que sí.

Permíteme contarte algo sobre el psicotrading.

Algo rápido, pero no por ello indoloro, sino más bien todo lo contrario:

El psicotrading no sirve para nada.

Pues empezamos bien, pensarás.

Me explico:

La literatura sobre la gestión emocional en el trading, abundante y repetitiva, no tiene nada de interesante a no ser que consigas extraerle el jugo mediante un propósito concreto.

Está bien como lectura y puede ser entretenida, pero no deja de ser teoría. Y la teoría ya la conoces, al menos la general y básica. Quizá expanda algo más tu visión, pero poco más.

La lectura genérica no aporta demasiado en cualquier otra circunstancia. Está bien en el sentido de persuadir de errores comunes. Y como pistas de la importancia capital de la correcta relación con las emociones en el trading. Pero no basta.

Con una operativa en real, ante el mercado, es cuando toma sentido llevarlo a la práctica de manera concreta.

Las relecturas una vez superadas ciertas etapas en real ganan una nueva dimensión. Una mucho más completa.

Se adquieren novedosos matices, más útiles para con tus objetivos en el mercado.

Esa son las verdades pepitas a extraer de las lecturas de psicotrading.

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El estudio de la mentalidad del trader trata de lo que te penaliza cuando operas. De tus estados mentales contraproducentes y de la correcta gestión de ellos (miedo, codicia, esperanza, expectativas…)

Pero mi papel como autor no consiste en indicar lo mal que lo haces, ni los errores que cometes, ni lo sencillo que sería el trading si lo hicieras de la manera correcta.

— Vale. Ya lo has dicho — Pensarás… Ahora sabes que, ante el precio, no estás actuando de la forma apropiada y, además, lo mismo te sientes culpable. 

Y es que, por un lado, quiero que detectes el origen del problema para poder solucionarlo. Es lo que te aportaría valor.

Ese es mi deseo y misión aquí.

Así que te voy a plantear textos sobre «lo que debe ser hecho», pero no por la crítica absurda a lo copy chulito, sino por dos motivos mucho más útiles:

1. Por la comprensión de lo que pudiera estar sucediendo y que lastra tus resultados.

2. Por la introspección y la reflexión. Para que puedas tomar las medidas oportunas.

Es lo que te toca.

Pues, por mucho que te hayan repetido el cuento de la riqueza fácil, operando unas pocas horas a la semana y desde la orilla de una playa paradisíaca… esto de trading, como sabrás, no va así.

Si bien, la relación trabajo-remuneración está muy integrada en nosotros: 

Hacemos algo y queremos algo a cambio.

Pero en el trading no es tan directo… y eso no lo llevas bien. 

Al principio no hay otro camino que el de currar y comerse el tarro.

Alcanzar la rentabilidad consistente con tu operativa no es fácil, ni rápido, ni necesariamente cómodo… Pero sí es simple:

Explota un sistema con ventaja estadística, aplica una estricta gestión del riesgo y mantente disciplinado en todo momento. Fin.

Difícil de entender entonces la famosa regla del 90/90/90:

«El 90% de los traders pierden el 90% de su dinero en los primeros 90 días de negociación».

En sí, dicha estadística ya podría estar afectando y condicionando a tu comportamiento. Empiezas con el miedo en el cuerpo.

Te lo dije: A comerse el coco.

Algunos de ese 90% son traders perdedores porque simple y llanamente no saben lo que hacen. Y también ignoran dónde está el problema.

Quizá sepan actuar, pero no conocen cómo explotar la ventaja que posiblemente ya tienen.

Están cerca del 10% que sí son rentables, pero no acaban de llegar.

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Si el problema no es el sistema, ¿cuál es el motivo oculto?

Resulta que, por difícil que sea de tragar, ¡el objetivo real de tu trading no es ganar dinero!

Por debajo está el querer tener la razón, o la necesidad de mostrar un conocimiento superior. O lograr estatus y relevancia en tu círculo. Sentirse respetado.

El pretender ser dueños de la razón conlleva el miedo a equivocarse.

A operar. A perder.

Atentando contra tu integridad como persona.

(Eso sí, no estoy aquí para ayudar a nadie con sus traumas; si crees que necesitas asistencia psicológica, ponte en manos de un profesional).

Como decía, la culpa la relacionamos con los stops loss. Fíjate que si son ganancias no lo llamamos culpa —no lo llamamos de ninguna manera—, por lo que se asocian las pérdidas con el dolor.

Es la trampa mental de vincular el resultado con el progreso.

Hay que ahondar en eso para ganar con el trading…

Esas emociones perniciosas son complicadas de afrontar, pues el cerebro usa mecanismos de defensa para evitar el dolor. Como el remordimiento, al que sucede la evasión, luego culpar a terceros: al mercado o a los integrantes en lo alto de la cadena alimenticia.

Eludes tu responsabilidad y entras en una espiral negativa de frustración.

Eso es lo que se pretende abordar con el psicotrading. No los consejos vacíos, agresivos, fríos, robóticos, calcados y sin personalidad, que ya habrás leído. Eso.

Es el error de centrarse exclusivamente en los resultados, que no llegan, y dedicarte, por tanto, palabras desagradables.

Aquí no vamos a echar balones fuera.

El fallo no está en el mercado, que ha cambiado. O en que los profesionales hayan ido a barrer tu stop. Ni de las noticias, que han girado tu posición ganadora. Ni en el cansino de Powell, ni en la inflación, ni en los conflictos geopolíticos.

El problema está mucho más cerca de lo que crees.

Sin la mentalidad adecuada, ya puedes pasarte todo el día llorando si quieres, pues solo alcanzarás a tener un hobby. Uno muy caro.

Aceptar este hecho habla mucho de tu trading y te enfoca en los puntos de mejora.

Siempre hay puntos de mejora.

Buscar en ellos tu motivación puede ser el gran apoyo que necesitas para avanzar.

Si cometes un error y aprendes de él, perfeccionas tu versión.

Es como depurar un programa informático para evolucionar a una versión mejorada.

Empiezas como Trader Beta 0.1

Te obsesionas con buscar errores para solucionarlos y progresar.

Aquí vamos a localizar esos defectos.

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Insisto.

Insisto porque es muy importante:

Esto tan intangible como es el marco emocional adecuado, es algo que puedes ir manejando y trabajando.

Con las cosas claras y definidas, la parte psicológica no tendrá tanto poder e influencia.

Evitarás caer en las trampas mentales tales como sobreanalizar, dudar, precipitarte, violar las reglas del sistema, crearte falsas expectativas, fliparte tras unas cuantas ganancias, cambiar cosas, sobreapalancarte, sobreoperar, seguir engullendo conocimiento técnico, que ya te sale por las orejas, descontrolarte, desconcentrarte, frustrarte, etc. 

Pero saber de su importancia no es lo determinante.

Lo relevante es conseguir llevarlo a la práctica y, así, impulsar tu trading.

Te podría decir que escribo de psicotrading, pero en realidad escribo de la vida.

Y, sobre todo, de cómo no depender de la caprichosa aparición de las emociones para ejercer un trading de alto nivel.

🔔 Así que, a partir de ahora, te voy a mandar a tu email un breve consejo diario a modo de recordatorio y reflexión pre-sesión. Te llegará antes de la apertura en USA.

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ℹ️ Más sobre mí y esta newsletter. Y más aún en el prólogo.