#54 La influencia del entorno
El entorno es capaz de modelar tu estilo de trading y la forma en que tomas decisiones.
No has elegido tu genética. Es la herencia que te ha tocado. Se siente. Como de tu sombra, no puedes huir de ella. Pero no tiene por qué ser determinante —enfermedades aparte, claro—. Hasta cierto punto, suele ser moldeable. Aunque esta tenga una influencia innegable en el comportamiento, el papel del entorno es moldeador e imposible de ignorar. Nuestra capacidad de adaptación lo avala. Que el ambiente influye en el rendimiento, cualesquiera que sean tus intenciones, no es algo que te vaya a descubrir ahora. Me hago cargo. Pero para con nuestro negocio, la trama se complica. Aún más si cabe. Y es que no hay día que no me pregunte cómo es que a los traders nos gusta tanto bajar al barro. Que no es por gusto, sino por obligación, pero una obligación escogida. Digno de estudio, sin duda.
En trading se sufre una dolencia afectiva que pocas otras profesiones padecen. Me refiero a la soledad. La soledad extrema. En cualquier otra empresa, una vez alcanzado el éxito, el vencedor reconocerá el respaldo del entorno. El escritor de best sellers dedicará unas líneas agradeciendo el apoyo y la paciencia de su círculo íntimo. La biografía del deportista de élite alabará los sacrificios de sus progenitores, sin los cuales nada hubiera sido posible. O más terrenal, el caso del joven emprendedor que, sin un chavo en los bolsillos, pretende levantar un negocio. Entonces entran en escena unos padres o familiares avalando la operación.
Si bien estos ejemplos cotidianos son una generalización, otra mayor es que al pobre trader le ocurre todo lo contrario. Desgraciado. Si decide verbalizar sus intenciones, será tachado de loco con cierta sorna. Eso con suerte. En otros casos lo será sin sarcasmo. Sin tapujos ni medias tintas. Y si insiste, corre el peligro de ser estigmatizado de por vida. Eso de la bolsa es imposible. El timo de la estampita. De malvados especuladores. Territorio de vendedores de crecepelo. Búscate un trabajo de verdad…
Otras veces la profesión va por dentro. Tan solo con mirar a la cara a la pareja sabes que no te va a aplaudir precisamente. Eso es un casino. ¿Te vas a jugar el pan de tus hijos? — Parece pensar. No lo es —no debe serlo— pero ese es el veredicto y punto. ¿Cómo vas a rendir con la espada de Damocles acariciándote el gaznate?
Y los colegas, tampoco ayudan. ¿Qué es eso del trading? ¿Es lo de ser broker? ¿Te vas a hacer rico con eso? El panadero de mi barrio compró nosequé moneda virtual y lo ha perdido todo… Al final, solo nos queda la retirada. — ¿A qué te dedicas? — A pellizcar cristales. Y a mamarla.
Insisto: es una generalización tristemente caricaturizada. Pero me la juego y sigo sosteniendo no estar tan lejos de la realidad. Lo cual no quita que, por supuesto, existan los casos de apoyo incondicional. Personalmente, doy fe. Soy un suertudo. Pero aun en esas situaciones ideales, puedes estar penalizado por otros aspectos, como tu pasado, tu cultura, tus valores, tu estatus, etc. La influencia del entorno en el desempeño del trader es un cariz crucial, y más en etapas tempranas de formación.
Desde el momento que comenzó tu carrera en los mercados, has estado expuesto a una serie de coyunturas que han influido significativamente en tu estilo de trading. Veamos cómo ciertos factores ambientales tienen el poder de impactar en tu operativa.
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